Otra embriagante melancolía invade la mañana de mi otoño
una fotografía ya borrosa, golpeada por el tiempo
lucha por recuperar su trazo
y los duendes revolotean en su propia porfía
empeñados en transportarme de su mano
recapitulando el periódico tan presente del pasado.
¡Tanto interrogante implora clemencia
apretando mi pecho intensa, eternamente!
y el cielo se cubre de un total desaliento
ocultando con nubes grises, la cálida sonrisa del sol.
olvidando aquel pacto sólido que teníamos
marchitando con lágrimas de penas, la semilla de mis tiempos.
Aqui yace tu aroma, tus sabores, tu esencia
y tan lejano mi corazón refleja tus besos
mañana frágil, abrazando páramos deshabitados,
perdiéndome entre fotografías y afectos
una mañana más, lejos de ti...desandando desiertos...
la aurora asoma su rostro y en mi mirada llueven los recuerdos.
Gaby Fleitas
Derechos Registrados.
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